VOLUGRAFO (1946 - 1948)



Volugrafo era el nombre de una empresa de Turín, Italia, que durante la Segunda Guerra Mundial fabricó motocicletas, remolques, piezas de avión y bombas de gasolina, y durante un breve periodo de tiempo en la posguerra (1946-1948) también fabricó un microcoche denominado “Volugrafo 46”, aunque popularmente también fue conocido como “Volugrafo Bimbo”.

El microcoche Volugrafo fue un proyecto presentado en noviembre de 1945 por el ingeniero y piloto de carreras Claudio Belmondo.

Belmondo ya había desarrollado en 1940 para la marca “Aermoto-Volugrafo” un scooter ligero y más tarde una pequeña motocicleta denominada también “Volugrafo” dirigida a las unidades paracaidistas de élite del ejército y que fue producida entre 1942 y 1944, hasta que los aliados bombardearon la fábrica.



Una vez terminado el proyecto del microcoche, Belmondo bautizó su creación con el nombre de “bimbo”, que es la abreviatura italiana de bambino o bebe.

En la Italia de la postguerra un microcoche era la única manera de desplazarse de forma autónoma.

Ligero, maniobrable y económico debido a su bajísimo consumo (3,3 litros a los 100 Km), el Volugrafo 46 o Volugrafo Bimbo fue una solución muy completa técnicamente para su época.

La carrocería aerodinámica, con una longitud de 2,4 metros y una altura de tan sólo 0,90 metros, era descubierta y de aluminio y podía albergar a dos pasajeros, a pesar de tener el volante en el centro del vehículo. El motor estaba situado en la parte posterior. Era un motor de motocicleta de 4 tiempos y 125 cc a 4000 rpm, que desarrollaba 4,5 h. Disponía de una caja de cambios manual de 3 velocidades, la transmisión era por cadena a la rueda posterior izquierda y la suspensión era por ballesta a las cuatro ruedas. La capacidad del depósito de combustible era de 15 litros y pesaba 125 Kg. Se sabe, que también existió una versión deportiva.

El Volugrafo 46 fue introducido en primavera de 1946 y dejó de producirse en 1948.

Con independencia de los que pudieran quedar en manos de particulares, se conocen al menos dos vehículos supervivientes expuestos en museos, uno de ellos se encuentra en el  “Musée Communal de l'Automobile” de Mahymobiles en Leuze-en-Hainaut, Bélgica y otro en el “Museo Ford Gratton” en Farra d’Isonzo, Italia. Entre los dos modelos supervivientes se pueden apreciar pequeñas diferencias, como por ejemplo en la decoración exterior delantera, los retrovisores exteriores, el color de los faros o el techo de lona.