ROOTES (Group) (1919...)



El grupo británico ROOTES no es una marca, sinó un conglomerado de marcas británicas que marcó una época irrepetible en la indústria de la automoción de ese país. (Hillman, Humber, Singer, Sunbeam, Talbot, Commer...)

Historia facilitada por gentileza de Francisco Javier Barrao, de Huesca.

La Rootes Motor Ltd fue el segundo gran trust del automóvil en el Reino Unido y englobaba marcas de los primeros tiempos del automovilismo británico. Sin embargo la familia Rootes no tiene un origen familiar industrial propiamente dicho, aun cuando partieran inicialmente de un taller de reparación de bicicletas fundado en 1888, mas bien se trata de una familia de vendedores de vehículos.

El Grupo Rootes responde al típico esquema de creación de gran grupo industrial a base de trabajo, coraje y audacia, el Viejo Lord Rootes, fue Lord como premio a su creación industrial.

El iniciador de éste negocio fue William Rootes, padre, que en el Condado de Kent, en el pueblo de Kentih Lane, se dedicó a la venta de vehículos, primero bicicletas y mas tarde automóviles, llegando con el tiempo a ser el mas importante vendedor de automóviles de todo el Reino Unido y a contar con una red de distribución que abarcaba todo el país. Sin embargo fueron sus hijos, William y Reginald quienes estaban llamados a encauzar por las vías de la mayor prosperidad el negocio.

William Rootes –(hijo) nació en 1894 y en 1910, contando la temprana edad de 16 años, fue colocado por su padre en la Singer Motor Ltd., para que aprendiera prácticamente como se construían los automóviles. El despierto primogénito tuvo unos años de aprendizaje duros que luego habrían de serle de la mayor utilidad. Después de su estancia en la Singer y de familiarizarse con los problemas industriales, William Rootes pasó a trabajar al lado de su padre quien en 1920 era un hábil negociante que instruyó a sus hijos en todos los problemas financieros. Con la ayuda de sus hijos, el viejo Rootes consiguió en 1926 una situación privilegiada en cuanto al negocio de compra venta se refiere, pudiendo acaudalar buenos beneficios que luego habrían de ser el origen de una gran fortuna. La ocasión de emplear su dinero inteligentemente no se hizo esperar. El final de los años veinte tuvo un signo adverso en la industria del automóvil y la primera sociedad que acusó una anemia económica fue la Humber Ltd. Que había empezado a construir automóviles en 1899, su dueño Thomas Humber, tuvo la desgraciada idea de comprar en 1926 la antigua fábrica Commer y aunque la adquisición representó un buen negocio, el capital de Humber era demasiado pequeño para acometer tal empresa por lo que, a los menores signos de crisis que ya empezaban a hacerse sensibles en 1928, se encontró con importantes dificultades financieras que le solucionados los Hnos. Rootes al comprar ambas fábricas.

Muy poco tiempo después, otra antigua fábrica inglesa se encontraba en idénticas dificultades que  Humber, era la Hillman Motor Car de Coventry, cuyas primeras unidades de automóviles databan de 1907, su fundador William Hillman , que se  había mantenido siempre en la tesitura de la fabricación de automóviles de lujo, en ningún momento Hillman aceptó las ideas de Ford, creyendo que al igual que la R.R. y otras firmas europeas, podría mantenerse con la fabricación de coches para millonarios. Pasada la primera crisis de 1920 el negocio de Hillman pasó por una buena época, pero esta fue fugaz, ya que en 1927 decrecieron las ventas de un modo alarmante, cuando llegó 1928 la situación de William Hillman era por demás incómoda e iba abocado a una estrepitosa quiebra cuando vendió la fábrica a los Hnos. Rootes.

Con éstas tres fábricas iniciales, William Rootes pudo demostrar sus magníficas condiciones de técnico y organizador, la fábrica de Hillman era la que mejor se hallaba preparada para la fabricación de un automóvil popular que, por encima de todas las crisis,  la sólida organización de ventas de Rootes podría vender en todos los rincones del país, así nació pronto el primer éxito que fue el Hillman Minx, automóvil de pequeña cilindrada, cuatro plazas y poco precio que, en 1930, se vendía muy bien pese a la competencia de la Austin y de la Morris. Paralelamente prepararon la fábrica Humber para la construcción de automóviles de mayor categoría e iniciaron la construcción de camiones a cargo de la Commer.

Cuatro años mas tarde la Organización Rootes gozaba de saneados ingresos y las tres fábricas, en combinación con la organización de ventas formaban un conjunto muy sólido.

Durante éste año de 1934 se le presentó a Rootes la ocasión de compra de una nueva fábrica, la Karrier Motor Ltd., dedicada a la fabricación de camiones desde los primeros años del siglo. La Karrier había pasado por muchas vicisitudes y había sorteado con bastante elegancia la crisis de los años veinte, pero en 1930, se enzarzaron en algunos proyectos calaminosos que la llevaron a la ruina. Tales fueron la creación de camiones todo terreno que pudieran circular  igualmente, tanto por carreteras como por montaña, éstos camiones normales eran diseñados para ser usados en las colinas inglesas donde la ausencia de carreteras impedía la venta de camiones normales. En previsión incluso de la falta de gasolina estudiaron un motor que funcionaba con aceite de coco, el proyecto no era del todo malo pero la situación económica de la Karrier no permitió llevar a feliz término las pruebas y cuando en 1934 los Hnos. Rootes hicieron una oferta para la compra de la fábrica los de Karrier no dudaron en aceptarla.

De nuevo William Rootes organizó la fábrica y con gran sentido práctico abandonó el proyecto del todo terreno para lanzarse a la fabricación de camiones que vendería junto con los Commer. Estas fábricas construyeron también furgonetas y tractores.

La gama industrial de los Hnos Rootes era completa, pero faltaba todavía el vehículo deportivo. Nuevamente se presentó una situación favorable cuando en 1937 los Hnos Rootes se hicieron cargo de la Clement-Talbot Ltd. Esta sociedad fundada en 1903, se había dedicado a la producción de automóviles rápidos y había obtenido magníficos premios. Paralelamente a ésta compra la Rootes adquiere otra famosa fábrica de automóviles de competición, la Sunbeam, que había obtenido varios records mundiales de velocidad. De la unión de ambas nació la Sunbeam-Talbot que fabricó automóviles deportivos y de competición hasta 1954.

Siguiendo la historia cuando se inició la segunda guerra mundial el trust creado por aquellos antiguos vendedores de automóviles era el mas importante del Reino Unido en construcción de automóviles de todo tipo.

Su producción de material bélico de todo tipo fue enorme y llegó incluso a construir motores de aviación y aviones completos, pero los alemanes sometieron todas sus fábricas a un pertinaz bombardeo que las dejó convertidas en escombros en 1945.

William Rootes reconstruyó pronto todas sus fábricas, debido a los grandes servicios prestados a la causa de los aliados gozaba de una gran protección por parte del estado, el cual prometió reservarle un gran porcentaje de la exportaciones que haría el Reino Unido en la post-guerra. Esta situación fue definitiva para asegurar el rápido resurgir de la Rootes Organización, instalando plantas de montaje en Australia y en otros mercados, llegando a exportar a USA en un principio 159 millones de $ y 303 millones de $ con posterioridad llegaron a ser los mayores distribuidores de coches y recambios de toda Europa, en tiempos de recesión económica, ellos prosperaban, mientras otras compañías estaban al borde de la quiebra, y entonces las compraban y las reflotaban como hicieron con: Humber, Hillman, Sunbeam, Commer, Karrier, Brithist-Pressing-Stells y Clement-Talbot. En 1955 Rootes se hizo cargo de una nueva fábrica la Singer Motor Ltd.

En los años cincuenta Rootes decide competir de forma oficial en los rallys del calendario europeo, Lord Rootes, no tenía especial interés personal por la competición, pero sabía de su eficacia publicitaria cuando había éxitos. Centró su esfuerzo en los Sunbeam-Talbot 90, por ser éstos coches mas aptos y por ser una denominación que engloba a dos marcas de pasado claramente deportivo. Los Sunbeam-Talbot lograron muchos éxitos de categoría en muchas pruebas, especialmente en el durísimo Rally de los Alpes, conocido por los ingleses como el Alpine Rally. El propio Stirling Moss, que entonces era un chico que prometía mucho, fue piloto oficial en muchas pruebas y logró numerosa victorias, en 1955 Malling & Fadum   vencieron en el Rally de Montecarlo con un Sunbeam-Talbot 90. El éxito en el Alpine Rally sugiere el nombre de Alpine para un modelo de Sunbeam-Talbot, un cabriolet derivado del 90. Será el primer Sunbeam en usar este nombre.

El Grupo Rootes se mantuvo con bastante éxito hasta finales de los años sesenta, fue en 1967 cuando Chrysler adquirió el grupo, aunque en realidad fue la British Leyland  la que intentó comprar el grupo sin conseguirlo, pues Chrysler había ya comprado acciones de Rootes a finales de los años treinta, pero su paquete fue minoritario hasta 1961. Con el gobierno laborista de aquellos años, las huelgas arreciaron, y, una huelga muy importante de la empresa Pressed Steels  llegó a inmovilizarles las cadenas de producción, pues esta empresa, filial de Rootes, fabricaba todas las carrocerías del grupo, los pedidos iban amontonándose sin poder ser servidos, con las correspondientes cancelaciones y pérdidas económicas, los sueldos y los gastos generales tenían que continuar siendo abonados puntualmente, mientras los ingresos caían en picado. Como B.L.era una empresa estatal en manos de los laboristas, con sus propias dificultades económicas, (Morris, Riley, Rover, MG, Austin, Wolseley, Triumph, etc.), y, a causa de la crisis económica, poco les interesaba la competencia de un grupo como Rootes, que vendían coches mucho mejor construidos, mas duraderos, mejor acabados y encima mas baratos que los suyos.

Por   lo tanto les bastó con movilizar a sus bases selectivamente, es decir: normalidad laboral en B.L. y conflicto continuo en Rootes, para intentar hundirla. No obstante solo lo consiguieron a medias. Ante la situación los Hnos. Rootes recabaron sin éxito la ayuda del gobierno  Wilson para salvar sus empresas y los puestos de trabajo, la única respuesta que obtuvieron, fue, seguir el camino de Jaguar.

Recordemos que el gobierno laborista hundió a Jaguar a base de sabotajes ocasionados por los obreros, hasta ponerla al borde de la ruina y luego la expropiaron, pues era privada al igual que Rootes. Mas tarde la intentaron reflotar como empresa pública sin conseguirlo, pues los Jaguar exportados a USA durante el periodo previo a la expropiación les dieron tan mala fama, debido a los sabotajes, que solo vendían una miseria. Mas tarde Mrs. Thatcher la reprivatizó y Jaguar ha recuperado su bien ganado prestigio como una de las mejores marcas de la historia.

A pesar de que Rootes había contribuido decisivamente a la victoria en la segunda guerra mundial y procurado al país verdaderas fortunas en divisas procedentes de las exportaciones y que daba trabajo a miles de empleados, parece que los laboristas hicieron oídos sordos y se negaron a prestarles ni una libra, pero...se quedaron con las ganas de robarles sus empresas, por que, Rootes tenía una importante organización en el extranjero y unas excelentes relaciones con Chrysler, que ya anteriormente les había financiado económicamente a cambio de acciones, y por fin decidieron venderles el grupo y pagar las deudas.

Chrysler fue el propietario del Grupo Rootes durante varios lustros, pero la crisis económica que aún campaba por sus respetos, les convenció de que no estaban haciendo demasiado buen negocio, y los socialistas seguían incordiándoles también a ellos.

Después Chrysler recibió una oferta por parte de Peugeot, -(se quedó con la Chrysler francesa e inglesa y la española la cerró)-, que desde hacía tiempo buscaba introducirse en el mercado británico como fabricante nacional. Peugeot había comprado Simca en Francia y también la antigua Talbot francesa, la adquisición del Grupo Rootes de la Chrysler tenía pues la ventaja de adquirir la Talbot Inglesa, con el beneficio de unificar ésta marca bicéfala y tener el nombre en exclusiva. Tal es la importancia histórica de ambas Talbot, que a partir de entonces, Peugeot, pasó a llamarse Peugeot-Talbot , tal y como hay la conocemos en España. Como hemos dicho en el periodo Rootes hubo coches denominados Sunbeam-Talbot. No podemos por menos que señalar lo curiosa que es la historia y la de vueltas que da a veces para volver al mismo sitio, pensemos en Talbot, de origen francés, se crea una sociedad en Inglaterra con ese nombre que poco a poco se va separando de la casa madre, hay pues, dos Talbot, la francesa y la inglesa. Ya hemos visto que la inglesa pasa a formar parte del Grupo Rootes, tras la segunda guerra mundial el nombre se utilizó en los Sunbeam que pasaron a denominarse Sunbeam-Talbot, para desaparecer este nombre después. La Talbot francesa tuvo días de gloria tras la adquisición de la misma por Tony Lago, pero los Talbot-Lago desaparecieron en 1960 y la sociedad y por tanto el nombre lo adquirió Simca, Simca fue adquirida por Chrysler....y Rootes también, posteriormente fueron vendidas por Chrysler al grupo Peugeot , que ante el galimatías de nombres y marcas, decidió simplificar la cosa a fin de lograr mas eficacia publicitaria, centrándose en un solo nombre para los productos de la ex Chrysler francesa e inglesa, que nombre..?, pues un nombre al que tenía pleno derecho legal tanto en Inglaterra como en francia y que era el mismo y además sonaba bien, simple de pronunciación, fácil de recordar y que permitía recordar la imagen del glorioso pasado que con tanto cambio de nombre y dueño se había perdido,  TALBOT, para afianzar la imagen de este nuevo-viejo nombre, se decide producir un coche para la competición, exactamente para rallys, el cual ganó el Campeonato Mundial de Rallys en 1981.

Se parte de la base de un dos puertas producido bajo la marca Sunbeam, como los nuevos productos deben llevar la marca Talbot, tenemos un Talbot-Sunbeam, al que se le añade Simca pues fue quien compró la Talbot francesa, tenemos pues un Talbot-Simca-Sunbeam, al que se le añade la denominación Lotus por haber estudiado esta firma parte de la mecánica, que viene  ser el reverso de los Sunbeam-Talbot de los años cincuenta.

Al final el nombre del coche quedó así: TALBOT-SIMCA-SUNBEAM-LOTUS. Por cierto con éste coche Antonio Zanini ganó el campeonato de España de Rallys, y aunque los profanos piensen que es un Talbot Horizón, no tienen nada en común.


POSDATA (Francisco Javier Barrao, de Huesca)

Las marcas del Grupo Rootes, mucho mas meritorias que las marcas de Brithist Motor, en lo que se refiere a robustez, acabados y calidad en una palabra, han sido sistemáticamente olvidadas e ignoradas por la prensa especializada británica, -ojo- Jaguar es una meritoria excepción completamente aparte de: MG, Triumph, Rover, Austin, Morris, -excepción Mini también-, Wolseley, Vanden Plas, Riley, etc. todas las grandes marcas de los años treinta y cuarenta totalmente “estropeadas” por su absorción por la estatal Brithist Motor, debido exclusivamente a que el Grupo Rootes –(Hillman, Humber, Sunbeam, Singer, Comer y Karrier)-, dejó de ser una verdadera empresa británica para convertirse en multinacional americana, con Chrysler y francesa con Peugeot después y la consiguiente sustitución de los excelentes diseños puramente británicos, que admitían perfectamente ser desarrollados hasta nuestros días, modernizándolos, si, pero manteniendo la calidad como idea capital, por “basura” que en nada se diferencia de los coches de plástico y hojalata que infestan ahora nuestras carreteras.

La mencionada política de ignorar todo aquello de oliera a Humber, Hillman, Singer, Sunbeam, etc., y ensalzar hasta el infinito la producción de B.M. que con no estar del todo mal, en  nada absolutamente era superior a ROOTES, aunque a base de artimañas consiguieron vender en mas cantidad y por lo tanto ganar al fin la dura batalla por el mercado, se debía ya está clarísimo  - a que cualquier modelo ROOTES se había quedado huérfano, al dejar de producirse modelos determinados, e incluso “enterrar” algunas de las marcas mas antiguas de la historia de la industria del automóvil en Inglaterra, que es como decir del mundo, mientras que B.M. mantenía en activo una inmensa mayoría de sus marcas, por supuesto transformadas en “bread and butter cars” igual que lo han hecho los demás desalmados, italianos, franceses, alemanes, americanos e incluso japoneses o suecos.

En resumen que utilizaron el incipiente entonces movimiento internacional del automóvil clásico, imponiendo dicha política como condición para anunciar sus “bodrios” modernos en las publicaciones, y si era necesario sobornando directamente a los periodistas de las mismas para convertirles en instrumento de propaganda para que la gente creyera que si un MG de 20 ó 30 años era tal maravilla, uno moderno tendría que ser necesariamente mejor y mas duradero, etc, Pero quienes creyeron salieron de su error, aunque ello les tomara una década –(1980-1990)-, para desengañarse definitivamente por triste y amarga experiencia propia.

Pero por mucho que quienes sean se empeñen en FALSEAR LA HISTORIA mas tarde o mas temprano la verdad siempre sale a relucir.