CLÚA (1.955 - 1.962)



Si el Biscuter fue el microcoche español más famoso, el fabricante de motocicletas Clúa fabricó el microcoche de líneas mas armoniosas y deportivas de la época, ya que algunas de sus carrocerías fueron firmadas por uno de los mejores carroceros españoles, Serra, que también diseño otro microcoche: el Biscuter Coupé o Pegasín.

Historia y modelos:

La empresa "Construcciones Metálicas Clúa" ubicada en Barcelona (España), conocida en los años 50 por sus motocicletas Clúa (antes MC y CMC), acometió en 1955 el proyecto de fabricar un cochecito tipo spyder de líneas elegantes dotado de un motor bicilíndrico dos tiempos anterior de 247 cc (más tarde se aumentó a 350 y 400 cc) con tracción delantera, 4 velocidades y marcha atrás, arranque eléctrico, chasis de viga central, suspensión independiente y ruedas 4,50 x 10.

En 1956 se incorporó un motor bicilíndrico de 4 tiempos de 497 cc (17CV a 5000 rpm y 69x65 mm) y algunos de ellos con una preciosa carrocería firmada por Serra inspirada en el modelo Z102-103 de Pegaso, las características de estos nuevos modelos según la publicidad de la época eran las siguientes:

Motor: 2 cilindros a 2 tiempos, cilindrada, 350, 400 y 500 c.c; culata de aluminio y cilindro de fundición con pistón de aluminio y bielas sobre rodillos, engrase por mezcla de aceite, carburador de nivel constante, cambio de velocidades, 4 hacia delante y 1 atrás, puesta en marcha motor de arranque por batería, diferencial de piñones rectos en los satélites y planetarios, embrague de discos múltiples en baño de aceite.

Instalación eléctrica: Encendido por batería 6V., 60 Amp y 12 V.,90 Amp, alumbrado con luz de población cruce y luz fuerte. indicadores de viraje, faro. stop y piloto.

Chasis y frenos: Frenos en las 4 ruedas hidráulicos, el de mano por palanca y cables en las ruedas traseras, suspensión cuatro ruedas independientes, ruedas de discos de acero estampado con neumáticos de 4,50 x 10.

Prestaciones: Consumo aproximado, 5 y 6 ½ por 100 Kms.y velocidad máxima 75 a 80 Kms. hora.

Por sus características este coche se situaba en un segmento superior al de los microcoches, incluso cerca de coches como el Seat 600 debido a la presencia que le otorgaba su elegante línea, sus excelentes acabados y sobre todo por su motor de cuatro tiempos por lo que se le auguraba un excelente futuro pese a que su precio de 64.000 Pesetas de la època lo situaba cerca del 600, ya que cuando fue presentado en la Feria de Muestras de Barcelona en 1957 tuvo un enorme éxito y se realizaron un gran número de pedidos con el compromiso de que en caso de cualquier defecto o anomalía la empresa devolvería el dinero al comprador y como las leyes de Murphy no fallan pasó lo que tenía que pasar; que la chapa se desajustaba por un defecto en su fabricación (ajena a Clúa) y la empresa se vio obligada a devolver el dinero a todo el que lo solicitó (que fueron muchos) lo que provocó que en 1960 liquidará las últimas unidades de este coche a 49.300 Pesetas y en 1962 la empresa quebró definitivamente. Se fabricaron aproximadamente unas 100 unidades en total.